La posiciòn antigènero argentina parte II
La banda del Opus Dei en la Cancillerìa
A fines de septiembre se celebró la Asamblea General de la ONU en la que Milei anunció que Argentina saldría del Pacto del Futuro, lanzó duras críticas a las Naciones Unidas y anunció que Argentina dejará de ser “neutral” en los conflictos bélicos
“Esta agenda va en contra de la vida, va en contra de la propiedad privada, va en contra de la libertad”, dijo Úrsula Basset sobre el Pacto del Futuro, y la Agenda 2045. Recordemos que Basset es una abogada ultra conservadora especializada en Derecho de Familia que responde a Karina Milei y funciona como “filtro” de temas de género y ambiente en la Cancillería. Entre varios cambios el gobierno libertario rebautizó a la Secretaría de Culto, a la que añadió “y Civilización”.
Bajo la conducción de Nahuel Sotelo Larcher, joven ultracatólico y negacionista del genocidio de Estado que abandonó la carrera de Derecho la Secretaría de Culto y Civilización buscará “promover valores y principios contenidos en la Constitución Nacional relativos a la civilización universal y al progreso económico, social y político” de la Argentina. A su vez incluye dos direcciones: la de Culto católico a cargo de Agustín Caulo, presidente del Frente Joven, conocida organización de sociedad civil antiderechos de escala regional que incide en los espacios multilaterales de derechos humanos.
Admirador de Jair Bolsonaro y Nayib Bukele, Sotelo está vinculado al ala más conservadora de la Iglesia católica, representada en el grupo llamado «La banda del Opus Dei» aunque él lo niega y se jacta de considerarse «aún más a la derecha que el Opus».